
Virginia Giuffre, voz clave en el escándalo de tráfico sexual de Jeffrey Epstein, se suicida
Redacción | V+ Noticias
Australia. Virginia Giuffre, conocida por su papel fundamental en la denuncia del escándalo de tráfico sexual orquestado por Jeffrey Epstein, falleció el pasado viernes en su granja en Australia Occidental. La víctima, quien tenía 41 años, se suicidó, según un comunicado emitido por su familia.
Giuffre, quien durante su juventud fue víctima de abuso y explotación sexual, reveló en 2019 que fue “pasada como una bandeja de frutas” entre poderosos depredadores, incluido el príncipe Andrés del Reino Unido.
En marzo de este año, había publicado en su cuenta de Instagram que estaba a punto de morir debido a una insuficiencia renal provocada por un accidente automovilístico con un autobús escolar, que, según sus palabras, circulaba a más de 110 kilómetros por hora.
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En el comunicado de su familia, Giuffre fue descrita como “una guerrera feroz en la lucha contra el abuso sexual y el tráfico de personas” y como “la luz que levantó a tantos sobrevivientes”.
En 2019, Epstein fue arrestado y acusado de tráfico sexual y conspiración por fiscales federales en el Distrito Sur de Nueva York, tras ser señalado por inducir a menores de edad a realizar masajes que se volvían cada vez más sexuales.
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Un mes después de su detención, y al día siguiente de que se hicieran públicos los documentos de una exitosa demanda por difamación presentada por Giuffre, Epstein fue encontrado muerto en su celda del Centro Correccional Metropolitano de Manhattan. La causa de su muerte, ocurrida a los 66 años, fue dictaminada como suicidio.
Virginia Giuffre había sido identificada inicialmente como Jane Doe 102 en 2009, cuando demandó a Epstein y a su cómplice Ghislaine Maxwell, hija del magnate británico de los medios Robert Maxwell, acusándolos de haberla reclutado para formar parte de la red de tráfico sexual de Epstein cuando aún era menor de edad, bajo la falsa promesa de convertirse en masajista profesional.
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