Matan en prisión al cantante Ian Watkins, condenado por delitos sexuales contra menores

Wakefield, Reino Unido; 11 de octubre de 2025. El exlíder de la banda británica Lostprophets, Ian Watkins, fue asesinado esta mañana en la prisión de alta seguridad HMP Wakefield, en West Yorkshire. A sus 48 años, Watkins cumplía una condena de 29 años por múltiples delitos sexuales, incluyendo la tentativa de violación de un bebé, por los cuales fue sentenciado en 2013.

Según informes, Watkins fue atacado con un cuchillo improvisado por otro recluso poco después de la apertura de las celdas. La puñalada le cortó la yugular, provocándole una hemorragia masiva que resultó fatal. A pesar de los esfuerzos de los servicios de emergencia, fue declarado muerto en el lugar.

Este incidente marca el segundo ataque grave que Watkins ha sufrido en prisión. En 2023, fue apuñalado y retenido como rehén por varios internos, lo que requirió la intervención de un grupo táctico especializado para su rescate. El ataque de hoy ha sido calificado como un asesinato por parte de la policía de West Yorkshire, que ha iniciado una investigación formal.

Watkins, nacido en 1977 en Merthyr Tydfil, Gales, alcanzó la fama en la década de 2000 como vocalista de Lostprophets. Sin embargo, su carrera terminó abruptamente en 2012 tras su arresto por delitos sexuales. La gravedad de sus crímenes, que incluían el abuso de menores y la posesión de material pornográfico infantil y zoofílico, conmocionó al público y a la comunidad musical.

Tras su condena, Lostprophets se disolvió y sus miembros continuaron con nuevos proyectos musicales. La banda No Devotion, formada por exintegrantes de Lostprophets, surgió como respuesta al escándalo.

La muerte de Watkins ha reavivado el debate sobre la seguridad en las prisiones de alta seguridad del Reino Unido, especialmente en instituciones como HMP Wakefield, conocida por albergar a algunos de los reclusos más peligrosos del país. Organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por la violencia en el sistema penitenciario y la protección de los internos.

Las autoridades penitenciarias han iniciado una revisión de los protocolos de seguridad en Wakefield y otras prisiones similares. Se espera que los resultados de la investigación arrojen luz sobre las circunstancias que llevaron al asesinato de Watkins y sobre posibles fallos en la supervisión de los reclusos.