Le da América Femenil batalla al Barcelona en el Azteca
Edgar Contreras | Agencia Reforma
Ciudad de México. Una pancarta con la leyenda “#SeAcabó. ¡No estás sola!” hizo vibrar al Estadio Azteca, en el marco del triunfo del Barcelona sobre el América Femenil 2-0, con goles de Claudia Pina al 44′ y Judit Pujols al 90’+3′.
A Jenni Hermoso le llueve apoyo desde distintas latitudes, incluso a 9 mil kilómetros del centro de Madrid, aun en el marco de un partido de futbol en la Ciudad de México.
En la ceremonia protocolaria, Andrea Pereira, la española que jugó cuatro temporadas para el Barsa y hoy comprometida con la causa azulcrema, llamó a sus compañeras para indicarles que no era momento de posar separadas para la fotografía, había que hacerlo juntas, intercaladas, abrazadas.
Ahí, mientras las futbolistas posaban con la manta, a Katty Martínez le pasaron una playera con el mensaje “Jenni, por ti y por todas”.
En uno de los extremos del Azteca, la barra Feminista Mx se sumaba al apoyo. Previamente, realizó una marcha en las inmediaciones del inmueble, en una convocatoria exclusiva “para mujeres y disidencias”, y con el objetivo de sumarse al apoyo a Hermoso y la inconformidad por las malas condiciones del futbol femenil español.
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Después, ya en la cancha, América pagó caro la falta de contundencia y un despiste defensivo. Naty Mauleón hizo sudar a las blaugranas, tanto con su disparo al poste como en aquella jugada en la que le rompió tantas veces la cintura a Claudia Pina, que ésta respondió con una patada merecedora de amarilla. Sarah Luebbert también amenazó dos veces, gracias a su velocidad, mientras que ni Kiana Palacios ni Katty Martínez estuvieron finas.
Tampoco estuvo precisa Kimberly Rodríguez, quien perdió el balón en la salida que habría de culminar en el gol de Claudia Pina, al 44′.
El América mostró el por qué tiene ya el récord de 16 victorias consecutivas en la Liga MX Femenil, aunque no exhibió ese poderío por el que presume 35 goles en el actual torneo.
En la compensación, Judit Pujols se inventó una pintura, con un zurdazo de media distancia, tras el que el balón entró de campana.
El grueso de los 34 mil 931 espectadores hizo una fiesta del América-Barcelona, pero hubo dos momentos estruendosos: la pancarta alusiva a Hermoso y el ingreso de la balón de oro Alexia Putellas, una de las 81 españolas que renunciaron a su Selección por el caso Rubiales.
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