Las condenas por feminicidio son irreductibles: SCJN
Ciudad de México; 16 de octubre de 2025. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que las condenas por feminicidio son irreductibles, estableciendo que ningún juez podrá disminuir la pena de una persona sentenciada por este delito alegando su derecho a la reinserción social. Esta decisión revoca el fallo de un tribunal que había reducido la pena máxima de 50 años de prisión a 42 años y medio para Diego Urik Mañón, condenado por el feminicidio de la maestra Jessica González Villaseñor en 2020.
El caso llegó a la Corte en junio de 2024, cuando la familia de la víctima impugnó la decisión del tribunal de Michoacán que había disminuido la pena del agresor. El pleno de la SCJN discutió y aprobó por unanimidad el proyecto de la ministra Loretta Ortiz Ahlf, creando una jurisprudencia obligatoria para jueces y magistrados. Esta jurisprudencia establece que la reinserción social prevista en el artículo 18 constitucional puede orientar las reglas generales sobre castigo, pero no puede servir de motivo para reducir o aumentar penas en casos concretos de feminicidio.
El ministro presidente de la SCJN, Hugo Aguilar Ortiz, señaló que el asesinato de Jessica González Villaseñor fue particularmente brutal, ya que la víctima sufrió traumatismo craneoencefálico y fue abandonada en un lugar despoblado. Estas circunstancias obligan a revisar el actuar de la autoridad que confirmó la disminución de la pena, subrayó Aguilar Ortiz.
La ministra Yasmín Esquivel destacó que el tribunal de apelación y el colegiado fallaron su deber de impartir justicia con perspectiva de género. Se consideró que la juventud del inculpado debía ser ponderada al momento de imponer la pena, a fin de no frustrar su plan de vida por el delito de feminicidio. Sin embargo, Esquivel enfatizó que a la víctima se le privó del derecho de ser mujer, y por lo tanto, no se puede justificar una reducción de la pena.
Con esta resolución, la SCJN refuerza el compromiso del Estado mexicano en la lucha contra la violencia de género y establece un precedente en la impartición de justicia en casos de feminicidio. La decisión busca garantizar que las penas impuestas por este delito sean proporcionales a la gravedad del mismo y que no se otorguen beneficios que puedan minimizar la responsabilidad del agresor.
La jurisprudencia emitida por la SCJN será vinculante para todos los tribunales del país, lo que implica que deberán aplicar este criterio en casos similares. Esto representa un avance significativo en la protección de los derechos de las mujeres y en el fortalecimiento del sistema de justicia penal mexicano.
Organizaciones civiles y defensoras de los derechos de las mujeres han celebrado la decisión de la Corte, considerándola un paso importante para erradicar la impunidad en casos de feminicidio y para garantizar que las víctimas reciban justicia. Sin embargo, también han señalado la necesidad de continuar trabajando en la implementación efectiva de políticas públicas que prevengan la violencia de género y que brinden apoyo integral a las víctimas.