¿Guerras de peluche?
Redacción | V+ Noticias
Nueva York. Resulta que hay muchos codos afilados en el negocio de los juguetes de peluche. Build-A-Bear y los creadores de Squishmallows se enfrentan en un tribunal federal.
Kelly Toys y su empresa matriz Jazwares, controlada por Berkshire Hathaway, han demandado a Build-A-Bear, diciendo que sus nuevos juguetes “Skoosherz” copian la apariencia de sus productos megapopulares Squishmallows.
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— Squishmallows (@squishmallows) December 18, 2023
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La línea Skoosherz, que Build-A-Bear comenzó a vender el mes pasado, tiene la “misma imagen comercial distintiva” de Squishmallows, dice la denuncia presentada el lunes, señalando similitudes en forma, estilo de cara, color y tela.
“Si una imagen vale más que mil palabras, comparar los productos originales de Squishmallows con los imitadores de Build-a-Bear dice mucho”, dijo Moez Kaba, abogado que representa a Kelly Toys y Jazwares, en un comunicado. Las empresas “defenderán enérgicamente” sus derechos de propiedad intelectual, añadió.
There's no better way to celebrate #nationalhugday than with a naturally huggable SKOOSHERZ ❤️ 🤗 pic.twitter.com/zRDhaRsnty
— buildabear (@buildabear) January 21, 2024
Jazwares busca daños y perjuicios no especificados y que Build-A-Bear deje de vender productos Skoosherz.
Pero Build-A-Bear respondió con su propia demanda el lunes, alegando que Skoosherz no infringe los derechos de los fabricantes de Squishmallows. Quiere una sentencia declarativa que diga que los derechos de imagen comercial reclamados por el fabricante de Squishmallow son inválidos e inaplicables.
El minorista con sede en St. Louis dice que los productos Skoosherz se basan en sus propios animales de peluche originales, “que se han vendido durante varios años”. La demanda señala que los productos de otras compañías que utilizan características expuestas en la queja de Jazwares existían mucho antes de que se creara Squishmallows.
“Si cada aspecto de la imagen comercial reclamada fuera de hecho una imagen comercial protegida, sería prácticamente imposible para los competidores crear diseños alternativos”, añadió Build-A-Bear. Dijo que la propia línea de Squishmallows también ha evolucionado y no siempre es consistente.
Los Squishmallows, que se crearon en 2016, se han disparado en popularidad. Según la firma de investigación de mercado Circana, el surtido de peluches de 8 pulgadas de la marca fue el juguete más vendido en Estados Unidos el año pasado.
Además de aumentar las ventas, los Squishmallows también se han convertido en una sensación en línea. Celebridades como Kim Kardashian y Lady Gaga, por ejemplo, han compartido imágenes de sus colecciones en las redes sociales.
En una declaración del martes, Jazwares acusó a Build-A-Bear de hacer “grandes esfuerzos” para capitalizar el éxito de Squishmallows.
La demanda de Jazwares, presentada en el Tribunal de Distrito de California, añade que la apariencia, el nombre y el marketing de Skoosherz ya han confundido a los consumidores, lo que ha provocado posibles pérdidas en las ventas.
Build-A-Bear respondió con su propia queja, que fue presentada a nivel federal desde Missouri, diciendo que no busca engañar a los consumidores y que “de hecho, no existe ninguna confusión real”.
El lanzamiento de Skoosherz en enero llegó anticipándose al Día de San Valentín, añadió Build-A-Bear.
Los abogados de Build-A-Bear y la compañía no respondieron de inmediato a las solicitudes de más comentarios el martes.
Esta no es la primera batalla legal sobre Squishmallows. En diciembre, Kelly Toys también demandó al gigante chino del comercio electrónico Alibaba, alegando que sus plataformas en línea se utilizaban para vender Squishmallows falsificados.
La matriz de Jazwares es Alleghany Corp., un gigante de seguros controlado por Berkshire Hathaway de Warren Buffett. Buffett no respondió de inmediato a un mensaje sobre las demandas del martes, pero el conglomerado del multimillonario con sede en Omaha, Nebraska, normalmente deja el manejo de dichos litigios a sus subsidiarias.
De hecho, Jazwares ofreció versiones lujosas de Squishmallow de Buffett y del fallecido Charlie Munger en la reunión anual de Berkshire la primavera pasada, y fueron un éxito entre los accionistas que estaban dispuestos a esperar horas en cola para comprarlos. Fue la primera vez que se ofrecieron productos de peluche a los accionistas desde que Berkshire compró Alleghany en 2022 por 11,600 millones de dólares.
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