
Fluminense queda fuera de la Copa Sudamericana entre violencia de aficionados
Río de Janeiro, 24 de septiembre de 2025. El Fluminense vivió una jornada amarga en el Maracaná al ser eliminado de la Copa Sudamericana por el Lanús argentino en los cuartos de final. El equipo brasileño no logró remontar el marcador global tras el empate 1-1 en casa, sumando una derrota por 2-1 en el global, luego de perder 1-0 en Buenos Aires la semana pasada. La eliminación se vio empañada por incidentes violentos en las gradas y la renuncia del entrenador Renato Gaúcho.
El partido comenzó con optimismo para los locales, quienes se adelantaron en el marcador gracias a un gol acrobático de Agustín Canobbio al minuto 67. Sin embargo, la alegría fue efímera, ya que Dylan Aquino, ingresado como suplente, empató para Lanús con un gol tras una asistencia de Marcelino Moreno, quien también había sido autor del gol de la victoria en la ida. Este empate dejó al Fluminense sin opciones de avanzar.
La situación se complicó aún más cuando, tras el gol de Lanús, estallaron enfrentamientos entre la policía y los aficionados visitantes en las tribunas del Maracaná. La violencia obligó a suspender el inicio del segundo tiempo por cerca de 20 minutos, y la policía utilizó cachiporras y gases lacrimógenos para controlar la situación. Este desorden podría acarrear sanciones para el club brasileño por no garantizar la seguridad en el estadio.
La tensión también afectó al cuerpo técnico. Renato Gaúcho, visiblemente molesto, presentó su renuncia tras el partido, expresando su frustración por la situación y dejando claro que no continuaría al frente del equipo. “Presenté mi renuncia”, dijo en rueda de prensa posterior al juego. “A partir de ahora va a estar otro aquí”, agregó, asegurando que siempre intentó “hacer lo mejor posible por el club”.
Este revés para el Fluminense es especialmente doloroso considerando su destacada participación en el Mundial de Clubes de la FIFA en julio, donde alcanzaron las semifinales. La eliminación prematura en la Copa Sudamericana representa una caída abrupta para un equipo que había mostrado un rendimiento prometedor en competencias internacionales.
La violencia en los estadios sudamericanos sigue siendo una preocupación recurrente. Este incidente se suma a otros recientes, como los enfrentamientos entre hinchas de Independiente y Universidad de Chile en Buenos Aires, que dejaron 19 heridos y llevaron a la descalificación del equipo argentino. La CONMEBOL enfrenta el desafío de implementar medidas efectivas para garantizar la seguridad en los partidos y evitar que estos episodios se repitan.
Por su parte, Lanús celebró su histórica clasificación a las semifinales de la Copa Sudamericana, donde se enfrentará al ganador de la serie entre Universidad de Chile y Alianza Lima. El equipo argentino buscará continuar con su destacada campaña en el torneo regional.