
Fallece Loni Anderson, ícono de la televisión estadounidense
Los Ángeles; 4 de agosto de 2025. La célebre actriz Loni Anderson, recordada por su papel de Jennifer Marlowe en la comedia WKRP in Cincinnati, falleció el domingo 3 de agosto de 2025 en un hospital de Los Ángeles tras una prolongada enfermedad, apenas días antes de cumplir 80 años, confirmó su publicista Cheryl J. Kagan.
Anderson nació el 5 de agosto de 1945 en Saint Paul, Minnesota, y su carrera profesional se consolidó cuando asumió el papel de una recepcionista astuta, elegante y empoderada en WKRP in Cincinnati (1978–1982), un rol que desafió el estereotipo de la rubia superficial y le valió dos nominaciones al Emmy y tres a los Golden Globe.
Antes de su aparición estelar en televisión, protagonizó papeles menores en filmaciones como Nevada Smith (1966) y realizó diversos cameos en programas en los setentas. Su salto a la fama transformó su vida profesional y la convirtió en un ícono de la cultura popular de los años ochenta .
Su matrimonio con el actor Burt Reynolds, iniciado en 1988 y marcado por la fama mediática, también fue una parte significativa de su historia pública; juntos adoptaron a su hijo Quinton antes de divorciarse en medio de una larga disputa legal que se resolvió en 1994.
A lo largo de su vida, Anderson fue defensora pública de la concientización sobre la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), en respuesta a su experiencia personal familiar, y en 1995 publicó My Life in High Heels, una autobiografía donde relató su infancia, los desafíos de su carrera y su vida personal.
Anderson también participó en producciones cinematográficas como Stroker Ace (1983), The Jayne Mansfield Story y en la voz del personaje Flo en All Dogs Go to Heaven (1989). Incluso en la década de 2020 formó parte del proyecto Ladies of the ’80s: A Divas Christmas, estrenado en 2023.
La artista deja un legado familiar: su esposo Bob Flick, la pareja se casó en 2008, su hija Deidra y su hijo Quinton, así como nietos y su hijastro Adam Flick con quienes compartía una vida entrañable hasta el final.
El mundo del entretenimiento lamenta su partida: colegas como Morgan Fairchild recordaron su amabilidad, profesionalismo y talento, mientras admiradores evocan la perspicacia con que combinó glamour, inteligencia y autenticidad en pantalla. La noticia ha generado una ola de tributos internacionales