
Estampida en centro de ayuda en Gaza deja al menos 20 muertos
Al menos 20 palestinos murieron el miércoles en una estampida durante la distribución de alimentos en un centro operado por la Gaza Humanitarian Foundation (GHF), respaldada por Estados Unidos e Israel, ubicado en Khan Younis, al sur de la Franja de Gaza.
De acuerdo con la propia GHF, 19 personas fueron aplastadas y una fue apuñalada en medio de lo que definieron como una “oleada peligrosa” provocada por agitadores armados, supuestamente vinculados con Hamás. La organización informó que se recuperó un arma en la multitud y que se usó gas pimienta de forma limitada para intentar contener el caos .
No obstante, el Ministerio de Salud de Gaza —controlado por Hamás— ofreció una versión diferente, señalando que 21 personas murieron: 15 por asfixia y seis por disparos, acusando a la GHF y al ejército israelí de abrir fuego sobre los civiles. Testigos también relataron que guardias cerraron las puertas y emplearon gases lacrimógenos o pimienta, lo cual sostuvo el pánico en el lugar.
Según el informe de la ONU y organizaciones humanitarias, los centros de la GHF han sido escenario de múltiples incidentes violentos: en las últimas seis semanas, cerca de 875 palestinos murieron intentando acceder a ayuda en estos puntos.
El contexto de esta tragedia es la creciente crisis humanitaria en Gaza, donde el bloqueo impuesto desde marzo ha llevado a la población al borde de la hambruna. Las criticadas operaciones de GHF, que sustituyeron al sistema de la ONU en la entrega de ayuda, son acusadas de no garantizar condiciones mínimas de seguridad y neutralidad.
La ONU y organizaciones internacionales han expresado su preocupación sobre el diseño y la cotidianeidad de riesgo: los centros operan en zonas militarizadas, con estrechos accesos y la presencia de personal armado, lo que favorece situaciones de violencia y colapsos.
A raíz de este nuevo episodio, Hamás exigió una investigación internacional y responsabilizó a Israel por utilizar la ayuda como mecanismo de control y represión, a la vez que calificó de inaceptable el modelo implementado por la GHF.