Desvían vuelo de Delta con casi 300 viajeros a isla en el Atlántico por falla mecánica

Redacción | V+ Noticias

Lajes, Portugal. Un vuelo de Delta Air Lines con destino a Nueva York fue desviado el domingo a una isla del océano Atlántico tras presentar una falla mecánica en pleno vuelo, lo que obligó a que los casi 300 pasajeros y tripulantes pasaran la noche en el archipiélago portugués de las Azores.

La aeronave, que partió de Madrid con dirección al aeropuerto John F. Kennedy, fue obligada a modificar su ruta cuando, ya sobre el Atlántico, la tripulación detectó una anomalía relacionada con uno de los motores.

“El equipo aterrizó el avión tras la indicación de un problema mecánico con un motor”, indicó un portavoz de Delta. La compañía no ofreció detalles adicionales sobre la naturaleza específica del desperfecto.

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El aparato aterrizó de manera segura en la isla de Terceira, donde se encuentra la base aérea de Lajes, una instalación militar que también alberga operaciones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. En este lugar se dirigió el vuelo, que transportaba aproximadamente a 282 pasajeros y 13 miembros de la tripulación.

Los pasajeros descendieron del avión y fueron hospedados en diversos hoteles de la isla, donde también recibieron alimentos, mientras técnicos especializados trabajaban en la aeronave.

“El vuelo aterrizó de forma segura, y ofrecemos nuestras más sinceras disculpas a nuestros clientes por su experiencia y el retraso en sus viajes”, señaló la aerolínea en un comunicado oficial.

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Al día siguiente, el 7 de julio, los pasajeros y el personal fueron trasladados en un nuevo avión hasta su destino original en la ciudad de Nueva York. Delta confirmó que ofrecerá compensaciones a los afectados por el desvío y la demora.

El incidente se suma a una serie de percances aéreos ocurridos en lo que va del año en Estados Unidos. En Washington D. C., un avión colisionó con un helicóptero Black Hawk, dejando un saldo de 60 muertos.

En otro episodio registrado en Toronto, un vuelo de Delta procedente de Minneapolis se incendió y volcó; pese a la gravedad del suceso, todos los ocupantes sobrevivieron.

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