
Caen remesas 16.2 % en junio, informa Banco de México
Ciudad de México, 2 de agosto de 2025. El Banco de México (Banxico) reportó que los ingresos por remesas familiares alcanzaron los 5 201 millones de dólares en junio, cifra que representa una caída anual del 16.2 %, el retroceso más pronunciado para ese mes desde septiembre de 2012.
Esta disminución obedece principalmente a una reducción del 14.3 % en el número de envíos —12.7 millones realizado durante junio— y a una baja del 2.2 % en el monto promedio por remesa, que se situó en 409 dólares.
Es el tercer mes consecutivo con variaciones interanuales negativas, lo que refleja una tendencia prolongada. Este descenso coincide con el endurecimiento de operativos migratorios en Estados Unidos, que ha disuadido a trabajores migrantes, especialmente indocumentados, de enviar dinero a sus familias.
Banxico también reveló que durante el primer semestre de 2025 los ingresos por remesas sumaron 29 576 millones de dólares, lo que implica una caída del 5.6 % respecto al mismo período de 2024. A su vez, el flujo acumulado en los últimos doce meses fue de 62 996 millones de dólares, un desplome del 2.19 %.
El gobierno mexicano aún no ha emitido una estrategia específica para compensar esta caída, lo que preocupa especialmente en estados altamente dependientes de este ingreso, como Guanajuato, Michoacán y Jalisco, donde las familias utilizan ese recurso para consumo básico, vivienda y educación.
Banxico detalló que el 99.1 % de las remesas se realizaron vía transferencias electrónicas, de las cuales el 51.1 % se cobraron en efectivo y el 48.9 % en cuentas bancarias o no bancarias.
Analistas de BBVA estiman que esta tendencia negativa es atribuible a la menor inserción de migrantes mexicanos al mercado laboral estadounidense, así como al mayor temor a deportaciones bajo políticas migratorias más estrictas. Aunado a ello, se prevé un impacto negativo en el consumo interno mexicano.
Este desplome sugiere un posible punto de inflexión tras más de una década de crecimiento constante en envíos desde Estados Unidos, y pone en evidencia la fragilidad de un flujo financiero clave para millones de hogares que lo consideran un salvavidas económico.