Antorcha de Milán-Cortina 2026 se enciende bajo techo ante riesgo de mal clima
Antigua Olimpia, Grecia; 26 de noviembre de 2025. La llama olímpica de los Juegos Olímpicos de Invierno Milán‑Cortina 2026 fue encendida hoy en una ceremonia inesperada en el interior del Museo Arqueológico de Olimpia, debido a los pronósticos de fuertes lluvias en la región que obligaron a suspender la tradicional ceremonia al aire libre.
En lugar del ritual habitual —en el que sacerdotisas evocan al dios Apolo y encienden la llama con los rayos del sol mediante un espejo parabólico— los organizadores optaron por proyectar un video del ensayo realizado días antes, y luego encender la antorcha oficialmente dentro del recinto protegido.
El primer relevo correspondió al remero griego Petros Gaidatzis, quien tomó la antorcha al salir del museo, seguido por la leyenda italiana del esquí de fondo Stefania Belmondo, con quien compartió el tramo inaugural del recorrido.
Se espera que la llama recorra Grecia durante aproximadamente una semana para luego ser entregada oficialmente en Atenas el 4 de diciembre a los organizadores italianos. A partir de allí iniciará su trayectoria por territorio italiano, culminando en el estadio San Siro de Milán, sede de la ceremonia de apertura, el próximo 6 de febrero de 2026.
El recorrido recorrerá cerca de 12 mil kilómetros, visitará alrededor de 60 ciudades y 300 pueblos, con más de 10 mil portadores de la antorcha —como parte del relevo olímpico más extenso en la historia de los Juegos de Invierno.
La presidenta del Comité Olímpico Internacional (COI), Kirsty Coventry, presente en el acto, destacó que a pesar de las modificaciones, la llama simboliza la unión entre pasado y presente, y subrayó la resiliencia del espíritu olímpico ante cualquier adversidad.
El cambio en el formato del encendido —una ceremonia más sobria, bajo techo y con transmisión simbólica— refleja la prioridad que los organizadores dieron a la seguridad climática, asegurando que la llama olímpica partirá rumbo a Italia sin contratiempos.
Este encendido marca oficialmente el inicio del camino hacia los Juegos de Invierno 2026, que regresan a Italia después de varias décadas, bajo la expectativa de una justa que combinará tradición olímpica con desafíos modernos, en un entorno de alta exigencia deportiva.