Sheinbaum cuestiona el uso de violencia en protestas de la CNTE pese a mesas de diálogo

Ciudad de México, 13 de noviembre de 2025. La presidenta Claudia Sheinbaum expresó su desconcierto ante los actos de violencia registrados en la manifestación de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en la Ciudad de México, considerando que se mantienen mesas de diálogo abiertas con el magisterio. 

Durante su conferencia de prensa, Sheinbaum recordó que el Gobierno federal ha atendido “muchísimas de las demandas” del magisterio y subrayó que los canales de comunicación siguen operando, por lo que cuestiona qué motivo tiene recurrir a la violencia para llegar al recinto de Palacio Nacional. 

La mandataria señaló que si las mesas de trabajo estuvieran cerradas o la autoridad se negara al diálogo, quizá podría entenderse una manifestación, pero enfatizó que “no es el caso”. En ese sentido lamentó que algunos docentes intentaran derribar las vallas metálicas alrededor del recinto oficial.

Sheinbaum reiteró que el pliego de demandas de la CNTE, entre ellas la abrogación de la Ley del ISSSTE 2007, ya está siendo evaluado, aunque reconoció que no hay recursos suficientes para revertirla en su totalidad, pero que existen alternativas y mesas de trabajo que analizan la situación. 

Respecto a los hechos del día, se reportaron enfrentamientos entre integrantes de la CNTE y la policía capitalina, cuando los profesores intentaron derribar las vallas que cercan el Palacio Nacional, lo que generó momentos de tensión y revisión de las vías de diálogo. 

La presidenta aprovechó para lanzar una reflexión sobre los intereses detrás de dichas protestas. “No se entiende, la verdad, o qué intereses haya, no sé”, expresó en relación con la decisión de manifestarse de forma violenta cuando los canales de negociación permanecen activos. 

Este pronunciamiento se da en el marco de una jornada de movilizaciones convocadas por la CNTE por espacio de 48 horas, en la que demandan la reinstalación de mesas y atención a sus peticiones laborales, mientras el Gobierno federal mantiene que la puerta del diálogo sigue abierta.