Protestas en Río: “Basta de masacre” por operativo que dejó más de 120 muertos

Río de Janeiro, 1 de noviembre de 2025. Decenas de personas se movilizaron en los complejos de favelas de Complexo do Alemão y Complexo da Penha con pancartas blancas y consignas como “Basta de masacre” tras un operativo policial que dejó al menos 121 muertos, cifra que la Defensoría Pública eleva hasta 132. 

Los manifestantes exigieron el fin de los operativos militarizados en las favelas y demandaron que se investigue en profundidad lo ocurrido, pues muchos de los cuerpos presentaban heridas graves y escenas que activistas califican como ejecuciones extrajudiciales. 

Familias de las víctimas contaron cómo recogieron cadáveres en calles y bosques de las zonas afectadas, algunos con cabezas decapitadas o desfigurados, lo que generó conmoción y denuncias de abuso de poder por parte de las fuerzas de seguridad. 

La operación, que involucró a más de 2 500 agentes y buscaba dar un golpe al grupo criminal Comando Vermelho, fue defendida por el gobierno estatal como un éxito, pero ha sido duramente criticada por organismos como Amnistía Internacional, que la calificaron como “matanza” dirigida a comunidades vulnerables. 

Mientras tanto, encuestas revelan que más del 50 por ciento de la población brasilera aprobó el operativo, cifra que asciende a 62 por ciento en Río de Janeiro, lo que evidencia la polarización entre demanda de seguridad y preocupación por los derechos humanos.

El gobierno federal anunció la apertura de una oficina de emergencia para combatir el crimen organizado y promovió una ley para fortalecer herramientas legales, aunque la oposición advierte que sin garantía de derechos civiles, la violencia se perpetuará. 

Las protestas continuaron en otros estados y ciudades del país, como São Paulo y Brasilia, donde la sociedad exige una reforma profunda del modelo de seguridad que ha normalizado la violencia en las periferias.