Yesavage impone marca histórica de ponches y pone a los Azulejos al borde del título

Ciudad de México; 30 de octubre de 2025. El novato Trey Yesavage protagonizó una actuación memorable en el Juego 5 de la Serie Mundial al lanzar siete entradas, permitir sólo tres hits, una carrera y establecer un nuevo récord con 12 ponches para un debutante en esta instancia. 

Gracias a ese dominio sobre la lomita, los Toronto Blue Jays vencieron al Los Angeles Dodgers con marcador de 6‑1, y quedaron a un triunfo de coronarse campeones de las Grandes Ligas. 

Yesavage no concedió bases por bolas e impuso récords adicionales: se convirtió en el primer novato en la historia de la Serie Mundial en ponchar a cinco bateadores consecutivos y en hacer que cada integrante del lineup rival viera al menos un ponche. 

La hazaña del pitcher de 22 años marca un salto meteórico en su carrera, ya que en menos de seis meses pasó de ligas menores a encabezar al equipo en la Serie Mundial. Su control, velocidad de recta y dominio en el juego lo catapultan como figura emergente. 

Los Blue Jays, reforzados por esta victoria, tienen la ventaja en la final y ahora enfocarían la atención en cerrar la serie en casa, con la oportunidad de levantar su primer trofeo en más de tres décadas. 

El impacto de la salida de Yesavage resuena no sólo en Toronto, sino en toda la MLB, por la dificultad de los récords que quebró y el contexto de presión en el que se presentaron. Su actuación refuerza la idea de que los novatos pueden marcar diferencias en los momentos cumbre.

Analistas ya observan cómo su actuación podría redefinir estrategias de pitcheo emergente en playoffs, especialmente en equipos que deciden confiar en talento joven en escenarios de máximo nivel.

Con este registro, Trey Yesavage entra al libro de historias gloriosas del béisbol, y los fanáticos de los Blue Jays esperan que su brazo sea clave para coronar la campaña y confirmar que la dinastía canadiense está de vuelta.