
Renuncia relámpago: Primer ministro francés dimite tras nombrar gobierno
París, 6 de octubre de 2025. El primer ministro francés, Sébastien Lecornu, presentó su renuncia apenas horas después de haber anunciado la conformación de su nuevo gabinete, sumiendo al país en una crisis política sin precedentes. El presidente Emmanuel Macron aceptó su renuncia mediante un comunicado oficial, reconociendo la imposibilidad de continuar bajo las condiciones actuales.
Lecornu había sido nombrado líder del Ejecutivo poco menos de un mes atrás, en reemplazo de François Bayrou. Su permanencia en el cargo se vio erosionada por la falta de consenso parlamentario y la fuerte oposición partidista ante su estrategia de gobierno.
Uno de los detonantes de la crisis fue la inclusión de antiguos miembros del gobierno anterior en su gabinete, lo que fue interpretado por amplios sectores como un continuismo no deseado. En particular, la designación de Bruno Le Maire, exministro de Economía, como ministro de Defensa generó fuertes críticas por parte de la oposición y de incluso algunos aliados de Lecornu.
Desde su breve discurso de renuncia en el Palacio de Matignon, Lecornu admitió que las condiciones para gobernar ya no existían. Señaló que había demasiadas “líneas rojas” impuestas en el Parlamento y que las negociaciones se habían estancado. Los ministros que apenas días antes habían sido nombrados quedaron en funciones como interinos hasta que se designe un nuevo Ejecutivo.
La oposición aprovechó la dimisión para exigir responsabilidades al presidente Macron, con la Agrupación Nacional (ultraderecha) reclamando elecciones anticipadas, mientras que la izquierda impulsó nuevas mociones de censura. El partido de Marine Le Pen aseguró que el Ejecutivo había llegado al “fin del camino” y exigió disolución del Parlamento.
El impacto en los mercados financieros fue inmediato: el índice bursátil CAC-40 sufrió una caída de casi dos por ciento. La prima de riesgo de Francia también se elevó ante la percepción de incertidumbre política y el temor de que el país ingrese en una nueva fase de inestabilidad.