
Corte Suprema de Brasil declara a Bolsonaro culpable de intento golpista
Brasilia, Brasil, 11 de septiembre de 2025. La Corte Suprema de Brasil emitió este jueves una histórica sentencia al declarar al expresidente Jair Bolsonaro culpable de atentar contra el orden democrático. La Primera Sala del tribunal votó cuatro a uno a favor de la condena, siendo esta la primera vez en la historia del país que un expresidente es condenado por intento de golpe de Estado.
Bolsonaro fue hallado culpable junto a otros siete acusados de delitos como intento de golpe de Estado, organización criminal, abolición violenta del Estado democrático de derecho, daño calificado y deterioro del patrimonio protegido. Entre los coacusados se encuentran exministros y altos mandos militares, quienes también enfrentan cargos relacionados con los eventos del 8 de enero de 2023, cuando una multitud irrumpió en las sedes de los tres poderes en Brasilia.
Los ministros Cristiano Zanin, Cármen Lúcia, Flávio Dino y Alexandre de Moraes votaron a favor de la condena, mientras que Luiz Fux se pronunció por la absolución de los acusados. El juez Zanin destacó que los actos del 8 de enero constituyen una “violencia inequívoca” con el objetivo de crear inestabilidad política y justificar medidas de excepción.
La Fiscalía General de la República había solicitado la condena de Bolsonaro por su presunta participación en la organización de un golpe de Estado tras su derrota en las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva. Se alegó que Bolsonaro, junto a otros actores políticos y militares, intentó derrocar al gobierno electo mediante la incitación a sus seguidores y la planificación de acciones violentas.
Tras la sentencia, los ministros de la Corte Suprema debatirán las penas que se aplicarán a los condenados. Las penas previstas por los cinco delitos señalados en la acusación pueden alcanzar hasta 43 años de prisión. Se espera que en los próximos días se anuncien las sentencias definitivas para cada uno de los acusados.
La condena de Bolsonaro ha generado reacciones tanto en Brasil como en el ámbito internacional. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó su satisfacción por la decisión judicial, calificándola como un paso importante para la consolidación de la democracia en el país. Por otro lado, simpatizantes de Bolsonaro han manifestado su desacuerdo, calificando el proceso judicial de persecución política.
Organizaciones de derechos humanos han aplaudido la sentencia, destacando la importancia de que los líderes políticos rindan cuentas por sus acciones y respeten el Estado de derecho. Se espera que esta decisión sirva como precedente en la lucha contra la impunidad y el fortalecimiento de las instituciones democráticas en Brasil.