Sheinbaum asegura que no hay motivo para sanciones a aerolíneas mexicanas
Ciudad de México, 21 de julio de 2025. La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró este lunes en conferencia que no existe razón alguna para que Estados Unidos imponga sanciones a aerolíneas mexicanas debido a los ajustes en la operación aérea del Valle de México, luego del anuncio de posibles medidas por parte de Washington.
Reiteró que la decisión de trasladar vuelos de carga del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA) respondió a criterios técnicos para garantizar la seguridad, y señaló que el país actuó con autoridad soberana, basándose en estudios especializados.
La mandataria destacó que hasta este momento México no ha recibido notificación formal alguna por parte de las autoridades de Estados Unidos; los señalamientos provienen únicamente de comunicados mediáticos, que serán analizados con detalle en cuanto se confirmen oficialmente.
Sheinbaum mencionó que este traslado de operaciones de carga ya lleva más de un año y las empresas de servicio las han adaptado. Por ello, subrayó, no debería existir ninguna base para imponer sanciones, recalcando que la prioridad fue y seguirá siendo la seguridad en la infraestructura aeroportuaria.
La Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero) respaldó esta postura, y afirmó que tanto el AICM como el AIFA han adoptado medidas para mejorar conectividad y eficiencia logística. Asimismo, hizo un llamado a establecer un diálogo técnico constructivo para atender las inquietudes de Estados Unidos.
La presión de EE. UU., canalizada por el Departamento de Transporte, contempla la revisión del estatus antimonopolio otorgado a la alianza entre Aeroméxico y Delta, así como restricciones en autorizaciones a nuevos vuelos chárter, si México no corrige lo que considera un incumplimiento del acuerdo bilateral de 2015.
Sin embargo, Sheinbaum confió en que “no hay por qué sancionarse algo que respalda la seguridad”, señalando que el AIFA “va muy bien” y que se espera la llegada de nuevos vuelos internacionales hacia finales de 2025, gracias a aduanas y controles reforzados.
Finalmente, la presidenta advirtió que México pretende privilegiar el diálogo sobre la confrontación. Dijo que en todas las negociaciones futuras en materia aéreo-comercial “no queremos entrar en confrontación con el gobierno de Estados Unidos, no le conviene a nadie”.