Hallan vivo al empresario Tariácuri Hernández, secuestrado por miembros del CJNG
Redacción | V+ Noticias
Erongarícuaro, Michoacán. El empresario Valdemar Tariácuri Hernández Rodríguez, secuestrado el pasado lunes en el restaurante de su propiedad en Pátzcuaro, Michoacán, fue localizado con vida la mañana de este jueves, del 21 de noviembre, en el municipio de Erongarícuaro, según informó la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSP).
La dependencia estatal precisó que, tras ser encontrado, el empresario recibió atención médica para verificar su estado de salud y será trasladado a Pátzcuaro para reencontrarse con sus familiares y formalizar su denuncia.
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Operativo conjunto y hallazgo
En las labores de búsqueda participaron la Guardia Civil de Michoacán, el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, corporaciones de Policía municipal y la Fiscalía General del Estado (FGE).
El alcalde de Pátzcuaro, Julio Arreola, celebró la localización de Tariácuri Hernández. “Tari ya está recibiendo atención médica y pronto podrá estar de nuevo con su familia aquí en Pátzcuaro”.
Tariácuri Hernández fue privado de su libertad mientras se encontraba en el restaurante Gran Tariácuri, situado en la entrada de Tzurumútaro.
Un grupo de sujetos armados irrumpió en el lugar a bordo de varios vehículos. Los agresores, equipados con fusiles y vestimenta táctica, intimidaron a los presentes antes de ubicar al empresario y llevárselo por la fuerza.
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Presunta participación del CJNG
Fuentes de seguridad citadas por los periodistas Carlos Arrieta y Ernesto Martínez Elorriaga señalan que presuntos integrantes del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), encabezados por Juan Álvarez Solorio, alias el J3, habrían perpetrado el secuestro. Este capo es señalado como el líder del grupo criminal en los municipios de Pátzcuaro, Tzintzuntzan, Quiroga y Zacapu.
Imágenes obtenidas del circuito de seguridad del restaurante muestran que el secuestro se ejecutó en menos de cinco minutos. Un comando de cinco hombres armados ingresó al establecimiento, mientras otro grupo permanecía en el exterior como apoyo. Testigos relatan que los asistentes, entre ellos familias completas, se refugiaron bajo las mesas para evitar el impacto de la violencia.
Antes de abandonar el lugar, los agresores sostuvieron un enfrentamiento con elementos de la Guardia Civil. A las afueras del restaurante quedaron evidencias de la confrontación, incluyendo dos camionetas con impactos de bala.
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