Brasil apuesta por sus minas

Redacción | V más Noticias 

Brasil. Los yacimientos que salen a subasta representan varios millones de toneladas de oro, diamantes, fosfato y caolín, entre otros. Se trata de las primeras subastas desde la elección del presidente Lula en enero de 2023. 

Esta práctica es habitual en el sector petrolero, pero reciente en el minero. Las primeras subastas se inauguraron con el expresidente Jair Bolsonaro en 2019.

El sector minero goza de buena salud en Brasil. Facturó 120.000 millones de reales en el primer semestre de 2023, lo que supone un aumento del 6% respecto al mismo periodo de 2022. Según el presidente del Instituto Brasileño de Minería (Ibram), Raul Jungmann, las cifras deben mejorar aún más de aquí a finales de año.

Preocupación medioambiental

Cinco proyectos participan en la subasta, todos situados en los estados del norte del país. La extracción de oro es un tema delicado en Brasil, debido al alto nivel de minería ilegal de oro en la Amazonía y en territorios indígenas. La extracción ilegal de oro provoca deforestación, contaminación de los ríos y numerosos conflictos sobre el terreno.

Los estudios preliminares del servicio geológico vinculado al Ministerio de Minas y Energía indican que algunos yacimientos se encuentran en zonas protegidas desde el punto de vista medioambiental. Por tanto, deberán explotarse de acuerdo con la normativa vigente.

Reducir las importaciones

El potencial de las minas de fosfato, que se extienden a caballo entre los estados de Pernambuco y Paraiba, reviste especial interés para Brasil. Reducirían la dependencia de las importaciones de este mineral, que se utiliza como fertilizante y es esencial para la agricultura brasileña.

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